Mamá tiene un radar,
un hogar en las mejillas,
besos que asoman de puntillas
de entre la noche cerrada.
Expuesto, mi cuerpo se ofrece
y brota de mi pecho un lazo
miel de madre en puro abrazo
que alimenta tu alma entera.
Bebe, hija de mi alma,
florecita de mi vientre,
mientras mi voz te acaricia
y tus párpados se duermen.
Bebe, hija de mi alma;
Toma, de mi centro, todo.
Darte vida me enriquece,
darte me llena de todo.
Bebe, hija de mi alma,
siente este calor hundido.
Cuando los cuerpos se mecen
y nuestro abrazo es un río.
Bebe, hija de mi alma,
Toma, de mi centro, todo.
Darte vida me enriquece,
darte me llena de todo.
_______
Poema extraído de nuestro Disco Libro “En el corazón de la Hembra Maga”. (Julián Bozzo)